Las alumnas de nivel uno del curso de repostería y pastillaje, parte del proyecto “Aprender para Emprender”, pusieron a prueba sus conocimientos con una evaluación especial: la preparación de un delicioso plato.
Estos fueron entregados con mucho cariño a clínicas de rehabilitación, el centro de diálisis, el hospital Nicolás Coto Infante, vigilantes de tránsito en servicio y personas de escasos recursos.
Bajo la visión del alcalde Alfonso Montalvan Cerezo, esta iniciativa se mantiene firme año tras año, combinando aprendizaje y valores humanos.

















